29 abril 2007

Nuevos diáconos...rezamos por ellos

El sábado 19 de mayo, por la imposición de manos de Mons. Carlos Amigo Vallejo –Cardenal Arzobispo de Sevilla–, recibirán la Ordenación diaconal los jóvenes salesianos Javier Comino y Marco Antonio Vázquez.
Bajo el lema “Haced lo que Él os diga” (Jn 2,5), la celebración eucarística y ordenación tendrá lugar en el Santuario de María Auxiliadora de Sevilla, a las 11.00 horas.Javier Comino nació en Montilla, es antiguo alumno del Colegio salesiano de esta localidad. Realizó su Primera Profesión como Salesiano en el verano de 1997. El período de postnoviciado lo vivió en Granada-Virgen de las Nieves, de donde salió a las Casas de Antequera y Ronda, que gozaron de su etapa como tirocinante.
Marco Antonio Vázquez, natural de Sevilla, fue oratoriano del Colegio de las Hijas de María Auxiliadora de San Vicente. Salesiano desde 1999, fue destinado a Granada-Virgen de las Nieves para realizar el postnoviciado. La Casa salesiana de Cádiz recogió su buen hacer durante el tirocinio que vivió en ella.

Durante estos años, ambos han cursado sus estudios de Teología en el Centro de Estudios Teológicos de Sevilla, mientras se preparaban para este momento importante de su recorrido vocacional.
Enhorabuena a Javi y a Marco, a su familia y a la Comunidad Inspectorial por esta celebración. Cuentan con nuestra oración.

15 abril 2007

Nueva Comisión Inspectorial de Hogares

Tras la Asamblea de hogares Don Bosco celebrada este fin de semana en Sevilla se ha culminado el proeceso d eunificación de las dos Inspectorias con la elección dela nueva comisión...Muchos de ellos son Cooperadores y muchos de ellos son de nuestra Zona. GRACIAS A TODAS Y TODOS por este servicio a la Asociación y a la Sociedad

Matrimonio coordinador Eva y Salvador HDB Córdoba
Matrimonio secretario Encarnita y Fernando HDB Ubeda
Matrimonio economia Tere y "barbi" HDB Jerez
Matrimonio visesecretario M.Carmen y Rafael HDb Córdoba
Matrimonio resp.zona Cádiz Carmen y Luis HDB Cádiz
Cooperadores pastoral familiar Fatima y Gervasio HDB Jaen
Delegado impectorial Abel Medina SDB
Delegada impectorial Sor Pilar Chinchilla FMA

10 abril 2007

Al hilo de la polémica con la parroquia Carlos Borromeo


El País, S. HIDALGO / Á. CORCUERA, 2007-04-08
Al frente de la parroquia de Pan Bendito (Carabanchel) trabaja el Salesiano Julio Yagüe. Él conoce de sobra a los curas de San Carlos Borromeo (Entrevías), a los que el arzobispado de Madrid ha prohibido dar misa por no atenerse a las reglas eclesiásticas. Con ellos ha compartido encierros y manifestaciones en los años ochenta contra el deterioro de los barrios por culpa de la droga.
La colonia de Pan Bendito tiene un 21% de población inmigrante. “En la parroquia damos apoyo a los marginados, pero ellos tienen que enfrentarse solos a la vida”, argumenta el sacerdote, de 59 años. Una mujer, Paula, interrumpe la conversación. Está buscando un sitio donde pasar la noche: sus hermanos la han echado de casa. El cura le da el nombre de varios albergues.
La parroquia tiene mucho trabajo: en el barrio hay gente trabajadora, pero también droga y delincuencia. La mezcla de gitanos, payos e inmigrantes dificulta la convivencia. Como muestra, el cura enseña una pintada enfrente del templo. Alguien escribió primero: “Gitanos de mierda”. Luego, otro la tachó y puso al lado: “Pallos de cagaos”.
La iglesia de Pan Bendito tiene varios proyectos. Uno trabaja con menores para que no caigan en la droga. También hay talleres de reinserción laboral para chavales que han dejado los estudios. Allí aprenden diseño gráfico por ordenador y arreglo de computadoras. Otros servicios que ofrece la parroquia son el de la búsqueda de empleo, la alfabetización o la ayuda a drogodependientes. “A los que están en metadona todos los días les damos algo que hacer, y también hacemos un seguimiento a sus familias”, explica Yagüe, que muestra un Cristo tallado en un tronco por un drogadicto.
Yagüe sí que viste alba y estola y da hostias en la eucaristía. Pero cree que la liturgia tiene que adaptarse a la realidad, “con respeto”, y que cada uno puede entender la fe como le apetezca. “Cada sacerdote trata de responder a su público”, señala. “Teníamos aquí una mujer, María Jesús, que hace unos seis meses fue hallada muerta en un banco de Arganzuela. Pues venía a misa, con su aspecto desaliñado, y se sentaba en primera fila. Alzaba las manos al cielo y gesticulaba, y todos la respetaban”, dice. Él se sentaba muchas noches con María Jesús a hablar mientras ella bebía de su litrona.
A Julio Yagüe, lo ocurrido con la parroquia de Entrevías le parece “poco sensato”. “La Iglesia tiene que ser dialogante. Me duele ver a unos sacerdotes amigos míos sentirse mal. Ante la sociedad hay que dar ejemplo de diálogo”, critica el párroco. Muchos parroquianos de Pan Bendito están perplejos por la clausura de San Carlos Borromeo. “Hay gente que no entiende de profundidades teológicas, sólo de que son atendidos en sus iglesias”, opina Pedro Gómez.
El mismo desánimo corre entre los feligreses de la parroquia de San Atanasio, en Tetuán. “Los siguientes vamos a ser nosotros”, teme una feligresa. El sacerdote José Luis Morales, de 75 años, describe su parroquia “como un cacho de garaje”. Y es que, efectivamente, el templo es un garaje que los feligreses comparten con un taller. En la puerta del local pone: “Parroquia de San Atanasio / Aluminios Vima”. Y para entrar hay que bajar una cuesta y abrir una puerta metálica.
En esta iglesia sus parroquianos se vuelcan, entre otras acciones, en la ayuda social a los inmigrantes. Sobre lo ocurrido con el cierre de la parroquia de Entrevías, el sacerdote de este peculiar templo cree que, como los curas rebeldes, la liturgia tiene que adaptarse a la realidad social. En su misa, por ejemplo, no hay homilía “ni rollo del cura”. “La gente comenta las lecturas desde lo que la palabra de Dios le dice al creyente, sobre cómo repercute en su vida diaria”, explica el sacerdote. Él vivió seis años en Perú y allí estudió el movimiento de la teología de la liberación, al que pertenecen los curas de San Carlos Borromeo, y del que este sacerdote de Tetuán es “simpatizante y amigo”. “La jerarquía eclesiástica está satisfecha aplaudiendo el paternalismo con los marginados, el limosneo. Y les parece peligroso que se ponga a los marginados en el centro de la Iglesia”, opina.
En Madrid hay 360 parroquias y 4 de cada 10 vecinos se consideran católicos practicantes, según datos de 2006 del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). Muchos madrileños se han alejado de los templos al no sentirse identificados con la liturgia. Las iglesias de barrio buscan con sus signos sencillos volver a atraer a los feligreses. Estas comunidades de base surgieron después del Concilio Vaticano II, sobre todo en América Latina. En España nacieron en los años setenta y ochenta como reflejo del movimiento latinoamericano y tuvieron su máximo referente en la figura del padre José María Llanos, que luchó contra la marginación en el Pozo del Tío Raimundo. Una época que coincidió con la entrada de la heroína en la vida de los jóvenes de los barrios de la periferia. Los curas más progresistas tomaron las parroquias de los barrios obreros para ayudar a los yonquis. Y también sus madres, y a las mujeres maltratadas, y a los chavales que abandonaron la escuela antes de tiempo, y ahora a los inmigrantes. Mientras, se han ido alejando de la jerarquía, aunque visto lo visto con Entrevías, muchos sacerdotes progresistas tienen miedo a represalias.
“Queremos otra Iglesia y ésta nos hace llorar”, afirma Fabián Fernández de Alarcón, de 71 años y párroco de Santa María de Fontarrón (Puente de Vallecas). Sorprende mucho que lo haga él, precisamente un cura, pero seguramente representa el sentir de muchos compañeros suyos. La Iglesia, entendida como la jerarquía o el poder, está alejada de la gente. Ésa es la principal conclusión tras una conversación con él. La causa del abandono de “muchos es la decepción que sufren” por la jerarquía eclesiástica.
Con él coinciden otros curas. Como Julio Lois, de la parroquia de Santo Tomás de Villanueva (Puente de Vallecas), que afirma: “Entrevías es la expresión de los problemas de la Iglesia”. Rafael Rojo, párroco de Canillejas, añade: “Si se cierra Borromeo por no hacer bien la liturgia, tendrían que cerrar otras 300 parroquias por lo contrario: por no cumplir su parte social”.
Fabián, el párroco de Santa María de Fontarrón, usa su túnica blanca los domingos, pero no lo hace en determinadas eucaristías con niños y jóvenes. Además, el pan que usa en las misas “es diferente al de las hostias normales”. Y cuenta: “Para mí lo importante es partir el pan. Hoy [Jueves Santo] he comprado un pan de pagès”. En sus misas se trata de dialogar. “No sé si es atípico, pero es lo que hacemos”, dice. Esa costumbre también la sigue Julio Lois, de Santo Tomás de Villanueva: “Leemos la palabra de Dios y la gente reflexiona”.
Fabián se siente algo incómodo si le preguntas por la liturgia antes que por la labor social de su parroquia. “Rehabilitación de drogadictos, bolsa de empleo, talleres para chavales con problemas, escuela de adultos…” son algunas actividades en las que se implica Santa María de Fontarrón. Este cura acude “personalmente a ver a jóvenes a la cárcel”. Su única queja: la diferencia entre prisiones. Mientras que en Soto del Real nunca tiene problemas para ver a chavales reclusos de su barrio, “en alguna prisión, que prefiero no nombrar, no me facilitan las visitas”.
Fabián recuerda cuando el barrio de Fontarrón era un mar de chabolas. “Es un barrio de realojamiento y había muchos problemas de droga”. Está implicado en todas las actividades de su parroquia, pero tiene que delegar: “No puedo estar en todo”.

08 abril 2007

UNA GRAN NOTICIA


Querido/a amigo/a:

Supone una gran alegría comunicarte que hoy ha sido promulgado nuestro nuevo Proyecto de Vida Apostólica. Es un verdadero regalo que sea precisamente en esta fecha, cuando celebramos la Resurrección de Jesús, el triunfo de la Vida, cuando se aprueba nuestro Proyecto de Vida Apostólica. Pedimos a Cristo Resucitado que nos ayude a ser fieles a este Proyecto, que la ocasión nos ayude a revitalizar nuestra vocación y nuestro servicio a la juventud.

Te adjunto el extracto de esta noticia que se puede encontrar en ans news:
http://www.sdb.org/ans/AnsNews/frame_AnsNews.asp?Lingua=3

También te adjunto las palabras de felicitación de Sr. Inspector, D. José Miguel Núñez. Dale toda la difusión posible entre los cooperadores (ya, y definitivamente, salesianos cooperadores), aspirantes y a toda la Familia salesiana.

Feliz Pascua de Resurrección.

Un abrazo. José Javier García-Carpintero. Coordinador inspectorial


Querido José Javier:
Un saludo cordial. Como ya sabrás, en este día 8 de abril de 2007 el Rector Mayor ha promulgado el nuevo Proyecto de Vida de los Salesianos Cooperadores. Me alegro profundamente y doy gracias a Dios que sigue haciendo grandes cosas en nuestra familia. No nos puede pasar desapercibido este acontecimiento en la fecha tan especial de la Pascua del Señor que tanto ha marcado la espiritualidad salesiana desde los orígenes. Felicito a la Asociación en nombre de todos mis hermanos salesianos y en el mío propio.
Deseo de verdad que este renovado Proyecto de Vida Apostólico redunde en la propia renovación de la Asociación como tú mismo nos expresabas en las buenas noches que dirigiste a los capitulares salesianos en Sanlúcar. Ruego al Padre por nuestra inspectoría y pido la fuerza y la luz del Espíritu del Resucitado para que nuestra vuelta a Don Bosco y a los jóvenes sea un camino compartido para hacer cada vez más realidad la profecía de Don Bosco: un vasto movimiento de personas al servicio de los jóvenes, especialmente los más abandonados.
Transmite mi saludo y felicitación a toda la Inspectoría.
¡Feliz Pascua de Resurrección! Un abrazo. A vuestra disposición, en comunión de intenciones. José Miguel Núñez, sdb Inspector